El alcalde de Houston, John Whitmire, confirmó que el siniestro dejó cuatro víctimas mortales, entre ellas un niño, pero no dio a conocer las identidades ni las edades de las mismas. Asimismo, detalló que la aeronave había partido del aeropuerto de Ellington, sin revelar cuál era su destino.
«Cuando se haga de día, si ven componentes de la aeronave y demás, asegúrense de no tocarlos, llamen al 911 y dígannos dónde están», declaró, por su parte, Noe Diaz, jefe del Departamento de Policía de la mencionada ciudad texana.
Varios organismos, entre ellos la Administración Federal de Aviación, ya han abierto una investigación para determinar las causas del accidente. De acuerdo con Mario Castillo, concejal del distrito H de Houston, se trata de una aeronave turística privada.