
Personal contratado por el gobierno federal comenzó esta mañana la reparación de las carpas del Centro de Atención para Migrantes mexicanos deportados en El Punto, que sufrieron ayer daños debido a las ráfagas de viento de hasta 55 kilómetros por hora que se registraron en Ciudad Juárez.
El campamento que cuenta con once carpas y mega-toldos sufrió el desprendimiento de lonas en varias de ellas, además del desprendimiento de tubos de las carpas más pequeñas, por lo que ayer fueron desalojados 120 trabajadores federales y se mantuvo resguardo por la Guardia Nacional, Bomberos y Protección Civil del Estado.
Esta mañana se comenzaron a reinstalar parte de las lonas que recubren los pabellones del campamento.
El espacio humanitario que comenzó a instalarse el martes 21 de enero, un día después de la toma de posesión del presidente Donald Trump, recibirá únicamente a mexicanos deportados, víctimas de las redadas en Estados Unidos, según se ha informado.
El megacampamento cuenta con diez áreas, entre las que se encuentran la sala de arribo, un área administrativa, otra de servicios de las dependencias, una zona de dormitorios y un área de dormitorios de aislamiento, en caso de presentar enfermedades.
También existe un almacén de alimentos y bodega para guardar otros artículos, áreas asignadas para la higiene personal, una zona de servicio médico, un área de alimentación y un área común de carga de celulares.